Desde UNIÓN PROGRESO y DEMOCRACIA pensamos que la proposición no de ley planteada este jueves pasado por Eusko Alkartasuna, con la que exigía que los presos vascos puedan estudiar en euskera en la Universidad Pública del País Vasco nunca se habría planteado si no hubiera presos etarras en las cárceles españolas. Es decir, nadie habría planteado la necesidad de que los diferentes presos no adscritos a ninguna banda criminal pudieran estudiar aquí o allá, en euskera o en castellano, si no tuvieran algunos como referencia vital para su acción política la existencia de ETA.
Y lo mismo ocurre con otra pnl que debatiremos en breve sobre el acercamiento necesario de los presos específicamente etarras a tierras vascas (y creo que de ningún otro), obviando algo tan evidente como que son precisamente los que no pertenecen a la banda los que más sufren el desarraigo de la lejanía con su familia o su lugar de convivencia. El debate de esta pnl llegará en breve al Parlamento.
Respecto a lo que se discutió el jueves, UNIÓN PROGRESO y DEMOCRACIA piensa lo que pensaríamos todos si no estuviéramos abducidos por el terrorismo criminal: es la UNIVERSIDAD NACIONAL de EDUCACIÓN a DISTANCIA (UNED) la universidad que reúne las condiciones necesarias y aporta las garantías y medios suficientes para que determinado tipo de población estudie en ella y lo haga en castellano, y en concreto la población reclusa. Esto es algo más que evidente y nadie lo puede poner en cuestión, por mucho que populares y socialistas jueguen a quedar bien ante los nacionalistas .
Porque se trata además de una UNIVERSIDAD moderna, en permanente mejora y extensión, tanto en alumnado como en carreras ofertadas, una universidad ejemplar en todos sus aspectos. La propia presentación de la UNED, en su web, lo señala claramente: "se trata de un centro universitario dirigido a todas aquellas personas que, por cualquier motivo, no pueden o no desean seguir sus estudios en una universidad presencial. El tipo de alumnado es, por lo tanto, muy heterogéneo, pudiendo abarcar desde el trabajador o el ama de casa que no han tenido anteriormente la oportunidad de estudiar, hasta el joven que desea compatibilizar sus estudios con una actividad laboral o el graduado que desea llevar a cabo una segunda carrera". Ésta es, por tanto, más allá de demagogias que ya empiezan a cansar, la universidad indicada para que los reclusos puedan estudiar las carreras que consideren.
El problema parece ser que ellos quieren estudiar en euskera. Los socialistas (y el PP) plantean instar a la UNED a iniciar los procedimientos necesarios para ofertar la enseñanza superior a la población reclusa en las dos lenguas oficiales de Euskadi.
Respecto a esta enmienda que presentaron los socialistas (y apoyada por la Confederación Española de Derechas Autónomas, o sea, el PP), qué decir: supongo sabrán que lo que pretende es sencillamente irrealizable, pues exigiría un cambio de rumbo en la UNED, profesorado bilingüe y nuevas infraestructuras. Además, esta universidad es nacional, radicada en Madrid, y es evidente que no hay demanda suficiente para ofertar ninguna carrera en euskera. Por tanto, la enmienda pretendía salvar un escollo. Un brindis al sol y nada más. Salir del problema. El tercer punto de la enmienda transaccionada entre los socialistas y populares, en la que se insta a la UNED a ofertar carreras en euskera es sencilla y claramente la nada. Y éste es el motivo fundamental de nuestra abstención, una vez que no han aceptado nuestra propuesta de votar tal enmienda por puntos (el primero de ellos se reconocía la labor realizada por la UNED, en el segundo se señalaba a la UNED como la apropiada para matricular a los presos etarras, y la tercera, vergonzosa y falsa, recogía la instancia del Parlamento Vasco a la UNED para que comience los procedimientos necesarios para ofertar carreras en euskera).
Por lo tanto, a lo que se podría instar, puestos a quedar bien, es a que la UNIVERSIDAD PÚBLICA VASCA oferte sus carreras “a distancia”. Porque también es evidente que es harto complicado que los presos realicen prácticas, se presenten a exámenes o asistan a clase para tomar apuntes. Y además existe una sentencia del Tribunal Supremo que suspendía de inmediato la matriculación de presos de ETA en la UPV.
Con lo cual, la conclusión es que los presos deberán estudiar alguna de las carreras que oferta la UNED y cursarla en castellano, que es de momento lo que esta Universidad oferta. Ésta es la realidad… una realidad que no parece que sea excesivamente dramática.
(UPyD finalmente se abstuvo a la enmienda transaccionada por populares y socialistas, por ser irreal el objetivo de instar a dicha universidad a ofertar carreras en euskera, y toda vez que ambos partidos se negaron a aceptar la votación por puntos de dicha enmienda).