martes, 31 de mayo de 2011

Discriminación por razón de lengua en Osakidetza.

El viernes pasado, durante el pleno de control, y tras escuchar atentamente las explicaciones de Rafael Bengoa, Consejero de Sanidad del Gobierno Vasco, pedí su dimisión, por incumplir el acuerdo parlamentario del 26 de octubre de 2009 que, a iniciativa de UPyD, le instaba a realizar una valoración no discriminatoria del euskera en las OPEs futuras de Osakidetza. Como suponíamos, continúa también en este campo la huelga de brazos caidos de este gobierno, incapaz de hilvanar siquiera un discurso alternativo al nacionalismo. Ningún cambio reseñable, más de lo mismo, ni una sola revisión de la política lingüística. En la próxima OPE de Osakidetza, a celebrar en próximos meses, se continuará privilegiando descaradamente a los conocedores de la lengua vasca, valorando más este hecho que los propios conocimientos profesionales. Una injusticia que sólo los muy obtusos no ven. Quizás en próximas semanas podamos paralizar este despropósito, vía iniciativas parlamentarias. Por nuestra parte, lo intentaremos. Pero el problema va más allá de este hecho concreto: la desgracia es que el socialismo vasco es incapaz de ofrecer una alternativa real al nacionalismo, un modelo reconocible, un proyecto político distinto, en cada una de sus políticas. Por cierto, El Correo obvió nuestra solicitud de dimisión y puso en mi boca algo que yo no dije. Según este diario, critiqué que el consejero exija euskera, "cuando él no lo habla". No dije tal cosa, aunque sí hice una referencia final a su desconocimiento del euskera. Le pregunté cómo se sentiría él si le hubieran exigido conocer euskera para ejercer su cargo, cuando es evidente que no lo necesita. Obviamente, no contestó.

martes, 24 de mayo de 2011

Palabras (de ánimo) de Savater.

"Querido Gorka: comparto tu preocupación... aunque no sabría cómo aliviarla. Desde el principio me pareció ridículo convertir la sentencia del Constitucional en el centro del problema de Bildu. Lo grave son los votantes, no los jueces; y los votantes no desaparecen porque los jueces digan una cosa u otra. Nuestra tarea (difícil, porque yo me he dedicado toda mi vida a ella con muy mediocres resultados) es intentar defender que la postura progresista no es el nacionalismo ni su pariente pobre, el vasquismo, sino la reivindicación del Estado de Derecho español. Mucha gente no lo entiende en Euskadi... o no le interesa entenderlo. En cualquier caso, no es algo que se pueda imponer con sentencias judiciales sino que hay que reivindicarlo día a día en los espacios públicos... si nos dejan, ahora que la violencia coactiva parece haberse acabado. Las elecciones han demostrado algo terrible, en efecto, pero que ya sabíamos, lo queramos o no: el terrorismo goza de una tolerancia entre la ciudadanía -por llamarla así- vasca muy extendida. Mira el desastre de Aralar, castigados por los votantes independentistas por haberse separado de ETA cuando la banda terrorista aún no les había autorizado a ello. Se puede renunciar a la violencia –futura, claro- cuando ETA da permiso y lo cree conveniente; antes, es traición al pueblo. La tarea que tenemos ahora no es nada fácil: defender las instituciones del Estado frente a quienes quieren utilizarlas para acabar con ellas y multiplicar nuestra presencia social, cultural y política en un medio que no nos va a ser nada favorable, por el triunfalismo antisistema de unos y el oportunismo de otros. Cuando todo conspira para silenciarnos, no hay más remedio que hablar muy alto. En fin, no tengo mejores noticias que darte. Si crees que estas líneas tienen algún interés, puedes utilizarlas en la web. Ánimo y un fuerte abrazo. Tu amigo y compañero, Fernando Savater".

lunes, 16 de mayo de 2011

UPyD: el voto de los progresistas.

Escuché ayer al Lehendakari reclamar el voto para su partido como modo de hacer frente a los recortes sociales del Partido Popular. Aparte de que no son éstas unas elecciones generales, ni siquiera autonómicas, es ciertamente llamativo escuchar al señor López decir tal cosa, aunque uno comprende que en campaña y fuera de ella cada cual puede decir las sandeces que se le ocurran. Por esto la clase política tiene la credibilidad que actualmente tiene. Por mi parte, creo muy probable que un PP en el Gobierno Central impulse nuevos recortes sociales, reduzca prestaciones y acelere privatizaciones. Y es casi seguro que defenderá el copago sanitario, menospreciará la educación pública y propondrá reducir impuestos a los que más tienen y ganan. Y es seguro que no impulsará las medidas modernizadoras que Euskadi y España necesitan, como la racionalización del Estado Autonómico, la eliminación de las diputaciones, la unificación de municipios, un sistema fiscal más justo y progresivo, la recuperación del impuesto sobre el patrimonio o medidas favorables a la investigación y el desarrollo, la internacionalización de nuestras empresas o un mercado nacional con menos trabas que las que actualmente tiene. En todo caso, lo criticaremos cuando se produzca, si se produce, y donde se produzca, pues el PP ya gobierna en muchas Comunidades Autónomas. De momento, los lugares donde el PP gobierna en Euskadi son casi inexistentes.





A día de hoy, lo que sabemos es quiénes han sido los que han impulsado los más graves recortes sociales de nuestra democracia: el Partido Socialista. E identificamos perfectamente estos recortes: la bajada del sueldo de los funcionarios, la congelación de las pensiones, la subida del IVA, el fin de la retroactividad en la ley de dependencia, la eliminación del impuesto sobre el patrimonio, la reforma laboral que facilita y abarata el despido y que no crea empleo o el retraso en la edad de jubilación, entre otras muchas. Y sabemos también quién ha apoyado estas medidas injustas, regresivas y antisociales en el Congreso de los Diputados: el PNV.





Es por esto que no cuela la llamada del Lehendakari a los progresistas de Euskadi, pues ellos los socialistas representan muy claramente el sector conservador que arrasa con el Estado del Bienestar y los derechos laborales. Es por esto que se necesita un partido realmente progresista en sus propuestas, radical en sus ideas en cuanto que van a la raíz de los problemas y revolucionario en el modo de transmitirlas: a pie de calle y en las redes sociales. Un partido político que defiende la eliminación de las diputaciones forales, la abolición del Concierto Económico, la eliminación de las barreras de todo tipo que dificultan en España la creación de empleo y la racionalización del Estado Autonómico. Por todo esto los progresistas de Euskadi tienen una referencia evidente y coherente en Unión Progreso y Democracia. Los conservadores son aquellos que pretenden que nada cambie, ni siquiera lo que nos lastra. Los progresistas los que proponen reformas políticas y económicas para salvaguardar el bienestar de los ciudadanos, atender más y mejor a los más débiles e impulsar más igualdad ciudadana. Es evidente que UPyD se encuentra entre estos segundos, por esto reclamamos desde la transversalidad política el voto de los progresistas.

miércoles, 11 de mayo de 2011

Una fotografía humillante.

Lo segundo que ha hecho el etarra Errandonea nada más salir de la cárcel tras 25 años de condena ha sido mostrar una pancarta de apoyo a Bildu. Lo primero ha sido lo habitual: cantar el himno que reivindica una vida criminal a sus espaldas. El Lehendakari ha dicho que esta imagen le ha repugnado. Sin embargo, ¿por qué le repugna esta imagen al Lehendakari? Si, según él y su gobierno y su partido socialista de Euskadi, Bildu era la apuesta definitiva de la llamada "izquierda abertzale" por las vías políticas y democráticas... ¿qué tiene de repugnante que un etarra liberado solicite el voto para un partido perfectamente legal y democrático? Esto es algo ciertamente contradictorio y pone en evidencia que el Lehendakari y su gobierno y su partido socialista están jugando a dos bandas. Pero una imagen (y toda nuestra experiencia vital rodeados por los proetarras) vale más que todos los argumentos jurídicos del mundo.


Señor Lehendakari: a nosotros sí que nos parece que esta imagen del etarra no arrepentido pidiendo el voto para Bildu y reivindicando a ETA (fíjense en los colores de la pancarta) es repugnante. A nosotros sí nos parece ciertamente humillante para nuestro Estado de Derecho. A nosotros sí nos parece una burla para las víctimas del terrorismo y para cualquiera que tenga un mínimo de sensibilidad democrática y dos dedos de frente. Y nos parece todo esto porque es coherente con lo que venimos diciendo por activa y por pasiva: Bildu es una creación del mundo de Batasuna, Batasuna ha impulsado Bildu y en Bildu está Batasuna. Y Batasuna y su mundo, señor Lehendakari, y señores miembros del Tribunal Constitucional, no ha roto fehacientemente con ETA ni exigido su disolución incondicinal. Conviene recordárselo.

viernes, 6 de mayo de 2011

Bildu, ahora dentro.

Se consumó el despropósito: el Tribunal Constitucional, con el voto favorable y determinante de los vocales nombrados por el PSOE, decidió ayer contradecir al Tribunal Supremo, a los argumentos planteados por la Abogacía del Estado y la Fiscalía y a los informes de la Guardia Civil y la Policía, informes que determinaban que Bildu es una coalición impulsada por ETA y Batasuna, compuesta por miembros de EA y Alternatiba y, sobre todo, de multitud de supuestos "independientes" pertenecientes al mundo de la "izquierda abertzale", tan limpios como pueden estarlo quienes han acompañado la historia criminal de la banda terrorista durante años (y siguen sin condenarla). Es posible que no habría suspicacias si la Justicia en España fuera independiente, pero ocurre que no lo es, puesto que la composición de los tribunales Supremo y Constitucional es definida por los partidos políticos. Y luego pasa lo que pasa: que, salvo los más ingenuos y dóciles a la estrategia nacionalista, nadie se cree que esta decisión haya sido independiente del poder político.




Por tanto, nos encontramos ante una malísima noticia para la democracia, para la moral pública y para derrotar definitivamente a ETA. Debemos recordar además que el Lehendakari del Gobierno Vasco, Patxi López, ha sido durante estas últimas semanas uno de los más activos defensores de la legalización de Bildu. Debemos recordar que el Lehendakari forma parte del PSE y del PSOE. Y debemos recordar que han sido los magistrados elegidos por el PSOE, supuestos progresistas (qué despropósito definirlos así), los que han legalizado Bildu. Por tanto, y por coherencia política, retiramos desde este mismo momento nuestro apoyo político al Lehendakari.




La primera iniciativa de UPyD en el Parlamento Vasco, hace ya dos años, fue plantear la disolución de los ayuntamientos gobernados por ANV en la Comunidad Autónoma del País Vasco y la Foral de Navarra. El PSE votó en contra de la iniciativa. Dos años después se cierra el círculo: con el apoyo explícito y entusiasta del PSE, los municipios y las Juntas Generales de Guipúzcoa, Vizcaya y Álava seguirán estando poblados de representantes de Batasuna y ETA.

lunes, 2 de mayo de 2011

Bildu, fuera.

La decisión de la Sala del 61 del Tribunal Supremo de rechazar las 254 listas de la coalición Bildu presentadas en Euskadi y Navarra para tratar de presentarse en las próximas elecciones municipales y forales es una grandísima noticia para la sociedad vasca, es una grandísima noticia para la sociedad española, es una grandísima noticia para acabar con ETA y es una grandísima noticia para alcanzar la libertad plena. A la espera de lo que diga en las próximas horas el Tribunal Constitucional, podemos sentirnos plenamente satisfechos, no sólo porque esta sentencia nos da la razón a los que hemos defendido en los últimos tiempos un discurso claramente argumentado e independiente de posiciones demagógicas o puramente electoralistas contra la legalización de Sortu o Bildu sino, sobre todo, porque hemos dado un nuevo paso para defender la democracia de quienes pretenden defender, contra ella, un proyecto totalitario, dentro de ella. Por tanto, cabe sentirnos satisfechos. Dicho esto, habrá quien quiera recordarnos que, como consecuencia de esta decisión del Tribunal Supremo, partidos políticos como Eusko Alkartasuna o Alternatiba no podrán estar presentes en las próximas elecciones. Y a estos les respondemos que fueron estas formaciones políticas quienes se prestaron a ese juego macabro, libremente, que fueron estas formaciones políticas quienes prestaron sus siglas para este engaño y que fueron estas formaciones políticas quienes asumieron docilmente los dictados del mundo batasuno (en un último servicio a la patria vasca, supongo, y acuciados por su más que evidente debilidad electoral y orgánica). Como ahora muchos repiten, recuerdo lo que ya dije hace semanas acerca de EA y Alternatiba en sede parlamentaria: decidieron prestarse a ser el viente de alquiler del mundo batasuno y el Estado de Derecho les responde hoy como corresponde: no podrán presentarse a las elecciones por coparticipar de un proyecto político auspiciado e impulsado por ETA-Batasuna.