Los diferentes medios de comunicación suelen ser altavoz de la supuestamente mayoritaria opinión de la ciudadanía que reclama a los representantes políticos (ahora soy yo uno de ellos, aunque sin corbata y agradecido, a diferencia del resto) una mayor cercanía e interés en sus problemas cotidianos. Como yo mismo me considero más ciudadano integral que político profesional, aunque cobre tanto como la media y disfrute bastante más que la mayoría de ellos, no necesito tanto acercarme a los ciudadanos pues habitualmente soy uno de ellos.
Hoy mismo, en la concentración convocada en Donosti por Gesto por la Paz en solidaridad con nosotros mismos, un amigo me ha propuesto algo que para él es tan "problema cotidiano" como para otro puede ser la crisis económica. Ante el boicot informativo general que nos asola y, más concretamente según sus propias palabras, ante la extraordinaria atención prestada por el DIARIO VASCO de hoy (y de siempre) a la izquierda abertzale no política (forma eufemística utilizada habitualmente por Ecenarro) y el silencio que guarda sobre nuestras iniciativas, este buen hombre me propuso la siguiente idea: manifestarnos ante las sedes correspondientes para que, ya que no nos citan, nos vean la cara. En parte le comprendo, pues nuestra rueda de prensa de ayer donde explicamos nuestra postura acerca de la huelga general convocada por los sindicatos nacionalistas para la próxima semana, merecía al menos una columna esquinada, como hicieron cuando dijeron malintencionadamente que un servidor votó en blanco la elección de Quiroga por desconocer el funcionamiento de la Mesa. Sería un hecho exótico, le dije. Tanto como que a esta concentración contra la indiferencia ciudadana ante la violencia de persecución se hayan acercado representantes del nacionalismo vasco, ideología política que dedicó la mayor parte de sus esfuerzos intelectuales el día de la investidura en reclamar la presencia batasúnica en la sede parlamentaria. Quede constancia, pues, de este problema cotidiano que afecta a este conciudadano. Para que luego nos digan que los representantes políticos no escuchamos los problema de la gente.
4 comentarios:
Pues tiene razón tu amigo; algo habría que hacer, ¿no?
Lo malo es que "ellos" por el momento tienen mucho dinero, y pueden pagar a los periódicos contratando anuncios en los que les saquen.
Y por el momento, UPyD es pobre, aunque ya no miserable, y no se puede permitir esas alegrías.
Hola Gorka.
?sabes como llamo yo a este boicot parodiando lo de Numancia?
Pues; "cerco mediatico a Upyd".
Pero este cerco tambie lo romperemos.
Saludso/Jose Maria
Lo semioculto lo ignorado, no por serlo deja de existir y llama la atención. Los ciudadanos que buscan encuentran y algo tan ocultado premeditadamente no deja de ser un reclamo.
Lo de Ecenarro me resulta curioso y además no sé si lo he entendido bien: ¿a ETA, o sea, al terrorismo nacionalista vasco lo llama “izquierda abertzale no política”? Si es así, tendremos referirnos a su grupo, al PNV a EA, etc…como el nacionalismo vasco no terrorista.
Hay otra cosa de Ecenarro, que se la he oído decir varias veces y que me parece deplorable, porque pone en evidencia su falta de formación política, según ella –al haber impedido que la trama civil de ETA se presentara a las elecciones- no se han ilegalizado ideas, sino personas, la argumentación es tan pobre que no merece comentario.
El lamento continuo en la sesión de investidura de todos los representantes nacionalistas –incluida Ezker Batua- de la ausencia de los de ETA en el nuevo Parlamento Vasco, me hace dudar muy seriamente de la calidad democrática de esos partidos, cuando es precisamente esa ausencia lo que hace que este Parlamento sea el más democrático y legítimo desde la Transición, por eso no me parece descabellada la denominación de nacionalismo vasco no terrorista para referirnos a estos partidos.
Quiero recordar que –lo mismo que ha sucedido ahora en el País Vasco- la ilegalización de determinados partidos no ha restado un ápice de legitimidad y democracia a los Parlamentos. Es el caso, por ejemplo, del Partido Socialista del Reich de los nostálgicos del Nacionalsocialismo en la alemania de la posguerra, fundado en 1949 por gente como Otto Ernst Remer (que paró el Golpe de julio de 1944 en Berlín tras el fallido atentado contra Hitler); en poco tiempo consiguió 10.000 militantes y cosechó importantes éxitos en los parlamentos de Bremen con 8 escaños y en el de Baja Sajonia con 16, lo cual no impidió que en 1952 se convirtiera en el primer partido prohibido por motivos ideológicos, sus escaños fueron anulados sin más y sus propiedades confiscadas y en ninguna parte del mundo se pensó que Alemania fuera menos democrática por esta decisión o que los votantes del partido prohibido –nada menos que 360.000 en Baja Sajonia- estuvieran ilegalizados, como habría dicho Ecenarro si hubiera vivido entonces.
Triana
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